DIRECTOR: Antonioni, Michelangelo
PAIS: Gran Bretaña
AÑO: 1966
DURACION: 105 min
INTERPRETES: Vanessa Redgrave, Sarah Miles, David Hemmings
Michelangelo Antonioni, se desplaza hasta Londres para rodar una de sus más difundidas películas, “Blow Up”.
En plena efervescencia del pop británico, el director italiano se deleita en retratar, sin escatimar esteticismos, el ambiente londinense de los sesenta.
A través del personaje de un fotógrafo, actividad también en boga, y recurriendo a todos los tópicos –sin dejar uno– sobre la nueva y supuestamente glamorosa profesión artística, Antonioni y su histriónico y petulante protagonista, nos ofrecen un muestrario de colores y formas sobre el pop más actual en el momento.
Tras el despilfarro de medios para contarnos lo bonito del colorista y desenfadado movimiento, en una segunda parte, afronta el cuento de Cortazar, en el que ha basado el guión.
Una mañana, el fotógrafo estando tomando instantáneas en un parque, sorprenderá a una pareja en actitud amorosa, al verse descubierta, la mujer tratará de destruir las evidencias. Ya en el laboratorio y tras imposibles ampliaciones, aparecerá un cadáver, inadvertido a primera vista. Al regresar al parque a comprobar el homicidio, el cadáver habrá desaparecido.
El derroche de color, estética o ambientación, magníficamente trabajados, además de documentar la juventud de la década, no da para mucho más. Tras los supuestos simbolismos y después de hora y media de proyección, ¿nos quedamos con la relatividad de la realidad?… sin duda, excesiva pretensión para tan simple, aunque vistoso, desarrollo.